Hola; soy Margarita Espinosa la cara oculta detrás de Caperucitazul.
Dedicada a la Ilustración y Pintura utilizo principalmente técnicas tradicionales y digitales para luego adaptarla a diferentes tipos de soportes y formatos.
He participado en diferentes exposiciones colectivas y en solitario en Bogotá, Barcelona; Palma de Mallorca y Menorca.
Los materiales más recurrentes en mi trabajo son las acuarelas y los acrílicos sobre papel o madera.
Nací en Bogotá (Colombia) donde estudié Diseño Gráfico ; al terminar mi carrera trabajé en diferentes medios de prensa, fui diseñadora Senior de varias empresas y trabajé para un par de agencias de publicidad pero de repente se me acabó el cuaderno de dibujos colombiano y decidí ''cruzar el charco'' en 2002 para estudiar Ilustración y Técnicas de Comunicación visual en Barcelona; estando en ello vine a pasar unas vacaciones a Menorca y aquí estoy instalada desde el 2006 en ésta pequeña isla en medio del Mediterráneo disfrutando aún de las vacaciones más largas de mi vida.
Entre proyectos, ferias, mercados artesanales y tienda física; había creado sin ni siquiera imaginarlo mi propia marca llamada CAPERUCITAZUL.
CAPERUCITAZUL parece que nace por generación espontánea como las bacterias, pero no. CAPERUCITAZUL es color, es azul marino, es tranquilidad y serenidad, es la niña interior que juega dentro de mí , es mi pasión , lo que más me gusta hacer, son mujeres que florecen llenas de vida, el mar menorquín que me rodea, los colores y la alegría de mi tierra, los faros que me guían, los peces y medusas que juegan a mis pies, el amor de mi familia y mis amigo/as es la mamá, la autónoma, la secretaria, ama de casa ,la ilustradora, la dibujante, son mis días de tristeza y alegría, mis paseos domingueros y mis horas interminables de trabajo y también de aprendizaje , de frustración y satisfacción y sobretodo de crecimiento ; es el más vivo reflejo de mi belleza interior que quiero compartir con todos y cada uno de ustedes.
Me gusta el compromiso con mi trabajo , la calidad de lo personal y la necesidad de seguir creyendo en el pequeño y justo comercio.
